Con el fin de frenar con los desperdicios de comida que se producen anualmente en Inglaterra (cerca de 18 millones), un grupo de activistas creó People’s Fridge, nevera pública en la que personas y negocios de comida pueden donar alimentos en Londres.
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La idea, que imita modelos ya establecidos en países como Alemania, España e India, fue puesta en marcha desde el año pasado por Ben Longman, Olivia Haughton, Sebastian Wood y Rebecca Trevalyan, quienes recaudaron dinero a través de Internet para poder establecer la nevera en la comunidad de Brixton.
Desde entonces es posible y está abierta al público de lunes a domingo entre 9:00 a.m. a 7:00 p.m.
No obstante, no todo tipo de comida puede llevarse al sitio. Por ejemplo, carnes crudas, mariscos y huevos no están permitidos.
Tampoco productos previamente congelados, utilizados o cocidos (excepto los que fueron preparadas por establecimientos de comida).
Tan reciente como el mes pasado, la Organización Mundial de las Naciones Unidas (y su departamento para la Alimentación y la Agricultura) advirtió que a raíz de la crisis mundial de alimentos hasta 20 millones de personas (de Nigeria, Somalia, Sudán del Sur y Yemen) podrían morir de hambre en los próximos seis meses.