Una investigación de la revista estadounidense Consumer Reports reveló la presencia de metales pesados en diferentes productos de comida para bebés.
Según el estudio, un 68 por ciento de los productos examinados (entre estos meriendas y cereales de algunas marcas en el mercado) contenían metales pesados como cadmio, mercurio, plomo y arsénico.
Estos primeros tres están ligados al cáncer, autismo, problemas del aparato respiratorio y esclerosis. Por su parte, el arsénico se asociada al cáncer y enfermedades cardiovasculares.
TAKE ACTION: A new CR analysis found worrisome levels of inorganic lead, arsenic, and cadmium in many packaged foods for babies and toddlers. Tell the FDA to take action to keep infants and toddlers safe. Sign our petition now: https://t.co/VScPJT9tPv pic.twitter.com/xQzGInMU4l
— Consumer Reports (@ConsumerReports) August 16, 2018
Los productos comestibles para niños generan anualmente sobre 53 mil millones de dólares.