La fonda boricua que es toda una experiencia gastronómica

Muchas veces me preguntan cuál es mi restaurante favorito y aunque es una conversación mucho más extensa y para otro momento, les quiero contar cuál es el restaurante puertorriqueño donde podría ir a comer todos los días.

Esta pequeña joya gastronómica está localizada en la Calle Loaiza Cordero en el corazón de la Milla de Oro en San Juan, pero no te dejes llevar por los estereotipos, es una fonda chic con un gran corazón latente y un ofrecimiento culinario único. Esa es la mejor definición para el restaurante: Hecho en Casa.

Desde el momento en que pones un pie dentro del local, todo es una experiencia sin igual. Ya dentro del lugar uno de sus dueños, Javier, te recibe con un calurosísimo saludo, una sonrisa vibrante, una energía contagiosa y un caldito caliente. Si es tu primera vez en el establecimiento, prepárate para una gran sorpresa.

Luego vas a pasar al área de ordenar el plato que deseas comer ese día. Casi todo se encuentra preparado en vitrinas muy autóctonas de fondas, donde puedes ver la gran mayoría de las opciones y sus complementos. ¡Hay sobre 20 complementos a escoger! Sin embargo, todas las semanas los platos principales, elaborados por el chef Norberto Díaz, cambian. La cocina de este creativo chef rota semanalmente, así que si hay un plato que te gusta, no lo vas a poder ordenar nuevamente por varias semanas o lo puedes usar como excusa para ir todas las semanas. Si ese día no estás muy aventurero, también cuenta con un nuevo fijo de platos criollo muy tradicionales pero con el toque especial de ellos.

Todos los lunes, por correo electrónico, te llega el menú de la semana con sus platos creativos y un poema que los describe. Si tienes suerte te puede tocar la semana donde tienen su plato estrella, y mi “all-time favorite”, la pechuga de pollo empanada en hojuelas de maíz con una salsa de tamarindo hecha en casa. Ese día no hay dieta que valga, créeme. Pero al igual que ese mangar de los dioses, también cuenta con otros platos estrellas como los piononos de pollo desmenuzado con muchos quesos, el pescado en una salsa tártara que te chuparás hasta los dedos, las costillas de BBQ en salsa de guayaba, el pastelón de malanga con carne molida y la gallinita de codorniz rellena de gloria y bañada en salsa de acerola. Cualquier plato que escojas, será la mejor decisión de tu día.

Después de haber seleccionado lo que vas a comer, y todos los complementos del mundo incluyendo dos tipos de arroces, majados, varios tipos de ensaladas y vegetales frescos, vas a pasar al salón anexo donde te transportarás por completo. Este lado tiene una vibra de restaurante decorado con amuletos, artefactos y recordatorios de los viajes alrededor del mundo que han dado sus dueños; y la música puede variar desde bossa-nova hasta salsa. De un lado a otro, te transportas de la fonda más tradicional y boricua a lo más chic con velitas. Pregunta por la mesa con vista al mar.

Esta fonda/restaurante, que solo abre de lunes a viernes para almuerzo, es el lugar idóneo para llevar amigos, familiares o clientes e impresionarlos desde que llegan hasta que se van. Jamás van a esperar lo que se van a encontrar dentro de este mágico lugar. Así que, no importa cuál es tu elección de comida y complementos, como el mismo Javi dice, tu vida no va a ser la misma. Y tiene toda la razón del mundo.

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Paul E González Mangual es un escritor puertorriqueño, columnista de Sabrosía Puerto Rico, amante de la gastronomía de alta calidad, entusiasta del whiskey, adicto al café y fundador de FOODIEcations.