Con la determinación y el deseo de alcanzar sus sueños a pesar de cualquier obstáculo, Yavett Vélez Rivera desarrolló un restaurante familiar temático que ha conquistado los paladares de Aguadilla. Su historia es un ejemplo vivo de que los límites solo existen en la mente.
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Nacido con parálisis cerebral, Yavett creció en un entorno familiar rodeado de valores, como la perseverancia. Gracias al apoyo incondicional de su familia, especialmente de su esposa Irielys García Hernández y de su hermano Michael Vélez Rivera, logró levantar el exitoso restaurante Malo es na Rest & Bar.
“Todo mi éxito no lo hubiese alcanzado sin la ayuda incondicional de mi esposa Irielys, quien siempre ha estado al frente de todo, permitiéndome dedicarme a la expansión y evolución del restaurante”, compartió Yavett con gratitud, reflejando su actitud optimista y perseverante.
Lo que comenzó como un pequeño negocio ambulante de pinchos junto a su hermano Michael en Añasco dio origen al nombre del restaurante, inspirado en una frase común de su pueblo natal “malo es na”.
Con el tiempo, Yavett decidió trasladarse al municipio de Aguadilla, donde por más de diez años han ofrecido una experiencia gastronómica que combina creatividad y sabor.
Sabores que cuentan historias
Su hermano Michael, chef y creador del menú, ha sido una pieza clave en el éxito del restaurante. Sus platos, llenos de originalidad, celebran la esencia de la cocina puertorriqueña. Entre los favoritos de los clientes destacan:
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El Ñaki del Mono Yuyo, un churrasco de doce onzas relleno de batata, bañado en salsa de setas y queso fundido, acompañado de mamposteado de gandules; La Liana de Tarzán, una pechuga de pollo rellena de amarillo, bañada en salsa Alfredo y coronada con camarones al grill; y el Filete Miñón Angus, una selección de diez onzas al grill, servida con tostones crujientes.
Los aperitivos no se quedan atrás. Desde las emblemáticas barriguitas de vieja coronadas con pernil horneado y acompañadas de una espectacular salsa de cilantro, hasta las croquetas de batata y las alcapurrias hechas en casa, cada bocado es una experiencia inolvidable.
Además, sus cócteles son obras de arte. El famoso mojito de coco con toronja rosada ha sido multipremiado en competencias de coctelería. Recientemente, la creatividad también fue reconocida en la octava edición del evento Trova & Coquito Fest con un coquito a base de maíz y canela.
Un legado familiar en cada plato
Para los hermanos Vélez Rivera, Malo es na Rest & Bar es más que un restaurante. Es un homenaje a su familia y a las enseñanzas de sus abuelos. Cada rincón del lugar, decorado con simpáticos monos que simbolizan la conexión entre la cocina y la coctelería, está diseñado para transmitir calidez y autenticidad.
Ubicado en la Base Ramey de Aguadilla, el restaurante es un espacio donde cada detalle ha sido pensado para que las familias se sientan como en casa.
r nuestra familia, para h onrar las enseñanzas de nuestros abuelos y para inspirar a otros a nunca rendirse”, puntualizó Yavett.
Malo es na Rest & Bar no es solo un lugar para comer; es un espacio donde los sueños se hacen realidad, donde el esfuerzo se transforma en sabor, y donde cada cliente se convierte en parte de una historia de amor y superación.
Si estás en Aguadilla no pierdas la oportunidad de vivir esta experiencia única.
Para más información puede comunicarse al (787) 826-8989.