Seguramente cuando eras más pequeño te enseñaron lo que era la pirámide alimenticia o más de un nutricionista te ha dicho que debes incluir más de ciertos alimentos en tu dieta para respetar la pirámide.
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No obstante, cómo llevar a la práctica esto durante el día parece ser más complicado o simplemente lo olvidamos. Esta nota de El Comidista explica cuál es la proporción del plato, específicamente el almuerzo, para que sea nutricionalmente correcto.
La fórmula incluye tres factores: vegetales, proteínas e hidratos de carbono. No metemos lácteos ni fruta porque en general se incluyen en postres o desayunos.
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Las proporciones para un adulto sano son: medio plato de vegetales, un cuarto de proteínas y un cuarto de carbohidratos. En caso de niños o deportistas los hidratos de carbono se pueden invertir. Un ejemplo puede ser un cuarto de arroz, pescado a la plancha y ensaladas varias.
En caso de adultos muy activos, se puede dividir en partes iguales las tres cosas. Además, el modelo del plato ideal se acompaña con un vaso de agua y postres que pueden consistir en fruta o yogur.
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