El inicio de año siempre es el “comienzo de una nueva dieta” para la mayoría de las personas que desean proponerse una meta en Año Nuevo y así comenzar a llevar una vida más saludable y con menos excesos.
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Aunque es difícil librarse de los excesos, no es complicado llevar una vida mucho más saludable y así cuidar tu cuerpo y salud. Con pequeños cambios, de a poco, puedes implementar una buena nutrición en tu sistema.
Cuidado con el pan que consumes
El primer consejo que posee el portal especializado en nutrición goodfood.com.au, es saber elegir el pan correcto. Las rebanadas de pan blanco gruesas y grandes agregará más carbohidratos a tu dieta, a diferencia de los panes, como el turco y el libanés, es algo más sano.
Desayuno saludable. Incluye el aguacate, pescado azul, nueces, semillas y aceite de oliva extra virgen todos los días en al menos de 3 a 4 porciones diarias. Estas grasas son buenas y ayudar al metabolismo, además ayuda a la sensación de saciedad.
No utilices ni mantequilla ni mayonesa
Cuidado con tus dips para untar. A la hora de comer buscar la mantequilla, margarina o mayonesa para untar en el pan es un paso completamente “normal” en tu rutina, pero desde el punto de vista nutricional es una falla.
“Estas pastas para untar tienen un alto contenido de grasas y calorías y pueden agregar una gran cantidad de aceite vegetal refinado a la dieta. Las opciones más ligeras pero sabrosas incluyen la creciente gama de salsas de verduras hechas con una base de pepino o remolacha, o pruebe el hummus o el puré de aguacate”, explica goodfood.com.au.
Vinagre balsámico y yogur griego
El otro paso significativo e importante es sazonar tus ensaladas con vinagre balsámico o sidra de manzana “para controlar el sabor y la glucosa en sangre”. Para las verduras cocidas recomiendan una cucharada de yogur griego, requesón, crema agria o salsa de queso casera.