El sistema inmunológico debe de estar bastante fortalecido y preparado para todas las enfermedades respiratorias que se puedan presentar a lo largo de la vida, en especial, en este comienzo del 2024, en donde se atraviesa el duro invierno de Norteamérica, lo que conlleva a la presencia de estas patología.
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El incremento en las ultimas semanas del COVID-19 es también una gran señal de atención para que cada ser humano puede desarrollar el fortalecimiento corporal mediante el correcto consumo de alimentos.
Cada sistema inmune necesita de nutrientes esenciales que incluyen vitaminas y minerales. A estos nutrientes los incorporamos a través de una alimentación equilibrada en variedad de macronutrientes, pero además de micronutrientes, sumando alimentos de diversos tipos y colores.
La importancia de las vitaminas y minerales
La vitamina E (liposoluble) y la vitamina C (hidrosoluble) poseen un alto poder antioxidante participando en el fortaleciendo del sistema inmunológico y reproductivo, además, favorece el crecimiento y desarrollo adecuados en niños y adolescentes.
En toda dieta debe estar presente el consumo de buenas cantidades de fruta, verduras, lácteos y cereales integrales. Asimismo, debe incluir una ingesta adecuada de grasas saludables entre las que encontramos el aceite de oliva y la palta acompañadas del consumo de pescados grasos como el salmón que aportan omega 3 y vitamina E.
Las proteínas son un importante macronutriente, por lo cual su consumo es fundamental, ya que aportan vitamina B12, hierro y zinc. Las legumbres son otro alimento beneficioso, ya que, además de aportar proteínas de origen vegetal, minerales y fibra, son de bajo índice glucémico.
Entre los alimentos altos en vitamina C podemos encontrar, además de los cítricos como las naranjas, algunos que consumimos a diario como los tomates y el ají morrón. Estos alimentos son un complemento ideal de las proteínas como las carnes para favorecer la absorción de hierro a nivel intestinal.