Las muffins pueden ser de muchos sabores: de chocolate, arándanos, de fresas… Hoy te damos la receta de muffins de guineo, según la web Recetasgratis.
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Ingredientes (para 5 comensales)
Preparación
- El primer paso es colocar las cápsulas de papel para muffins en los moldes y precalienta el horno a 180 ºC, con calor arriba y abajo. Espolvorea un poco de harina en los capacillos para que la masa no se quede pegada.
- Después, tamiza la harina con el bicarbonato, mezcla y reserva en un bowl. Puedes usar sin problemas harina leudante o de repostería, harina integral e, incluso, harina sin gluten en caso de querer hacer los muffins de guineos aptos para celíacos. También, si quieres, puedes sustituir el bicarbonato por levadura en polvo.
- A continuación, en otro recipiente, machaca con un tenedor las guineos sin llegar a hacerlos puré. Puedes servirte de dos guineos maduras de tamaño medio, pero también se podrían añadir tres de tamaño pequeño o uno de tamaño grande. Lo mismo sucede en caso de usar bananas, o usar dos medianas o una grande.
- Luego, añade el huevo y el aceite e intégralos con el mismo tenedor. Si no tienes aceite de oliva, puedes usar aceite de coco o sumar la cantidad de aceite a la cantidad de leche, aunque adelantamos que el sabor puede variar.
- Ahora, Incorpora el azúcar y sigue mezclando. Si quieres hacer los muffins de plátano más saludables, puedes usar azúcar moreno o, directamente, retirar este ingrediente de la receta, ya que la fruta ya contiene azúcar.
- Agrega la leche de avena y sigue mezclando.
- Incorpora la mezcla de harina y bicarbonato poco a poco, de manera que primero integra la mitad y, después, el resto. Para facilitar la tarea, se recomienda utilizar una espátula y hacer movimientos envolventes suaves. Si quieres dar un toque extra de sabor a los muffins de guineo, puedes agregar en este momento un poco de esencia de vainilla o canela en polvo o almendras.
- Llena los moldes con la masa hasta ocupar casi toda su capacidad. Hecho esto, hornea los muffins durante 20-25 minutos, o hasta que estén listos.
- Cuando los saques del horno, haz la famosa prueba del palillo y si al introducirlo sale seco, es que están bien hechas. Déjalas enfriar unos minutos y luego, a comerlas bien tiernas.
¡Listas! Ya tienes una merienda nueva que incorporar.
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