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En este Thanksgiving además de comer pavo, debemos dar las ''gracias''

Agradezcamos por las manos que cultivan la tierra, los alimentos, las mentes detrás de las recetas y más. l Lee la columna de Paul González:

Uno de los días más especiales y esperados de todo el año es el cuarto jueves de noviembre: el día de decir gracias y comer mucho pavo. Este día no solo se les rinde tributo a una gran tradición de nuestros antepasados, sino que también se ha convertido en la excusa perfecta para brindar por la vida, comer en familia y llevarnos las sobras para al otro día preparar un glorioso sándwich que revive muertos.

Históricamente este día se lleva celebrando en el occidente desde que los peregrinos se sentaron a compartir una cena memorable con los indios nativos de Norte América en 1621. A pesar de que lo celebramos con pavo, majado de papa, arroz, pan a base de harina y pie de calabaza (no había horno), la realidad es que los historiadores culinarios cuentan que es improbable que la primera cena incluyó estos platos. De acuerdo con las condiciones de la zona y las técnicas de cocina de la época, se entiende que en la mesa había ciervo, pato o paloma asada, una gran variedad de mariscos (langosta, ostras, anguila, almejas y mejillones), harina de maíz, nueces, calabaza, frutas (ciruelas, uvas, grosellas, frambuesas, arándanos) y vegetales (cebollas, granos, lechuga, espinaca, zanahoria, repollo, chicharos) oriundos de la región. Muchas de los alimentos que hoy encontramos en nuestras cenas de Thanksgiving han sido evoluciones de la alimentación de la raza humana, la accesibilidad a nuevos productos por vía de la importación, elaboración de nuevas tecnologías para cocinar y la diversificación de las recetas y técnicas de cocina. Sin embargo, no importa que finalmente hubiera sobre la mesa, lo más importante es que hoy continuamos poniendo en acción esa actitud de gratitud.

La realidad es que, una cena no es suficiente para decir gracias por todas esas cosas que tenemos a nuestra disposición día tras día. Luego de ese banquete otoñal, debemos sentarnos a reflexionar sobre cómo podemos mantener viva esa cultura de gratitud en nuestro diario vivir. Existen millones de cosas, momentos y personas por las que dar gracias aunque a veces pasen por desapercibidas. Así que cuando estemos sobreviviendo al food coma, reflexionemos más allá de la comida y agradezcamos lo siguiente:

Las manos que cultivaron la tierra: Son los agricultores los primeros, y más importantes, en la cadena de alimentos. Sin su dedicación, esfuerzo y sudor, no sería posible cada ingrediente.

A los pioneros de este día: Gracias a estos valientes que se sentaron en una mesa comunal a compartir alimentos tenemos una excusa anual para recordarnos el poder de decir \’\’gracias\’\’.

Por todos los alimentos: Da igual si la mesa está repleta de comida o si hay solo una taza de arroz para compartir entre todos. Lo importante es pasarlo rodeado de amor y llenar el lugar de agradecimiento.

Las recetas que se utilizaron: Detrás de cada plato hay una historia que contar. Muchas de las recetas han pasado de generación en generación para finalmente estar en nuestra mesa y poder degustarla.

Los otros 364 días del año: Decir gracias no solo debe ser por esa comida o por lo que representa este día, también debemos decirlo por todo lo bueno y lo malo del resto del año que pasó y el que viene.

Al igual que en ese primer Thanksgiving, tomemos este día como una gran oportunidad para agradecer al universo por todas esas cosas pequeñas y extraordinarias que hacen que la vida sea vida. Este día es extremadamente especial porque nuestro país se une y utiliza como excusa un banquete para emanar energía positiva, compartir con seres queridos y contagiar con una sola palabra a todo el que la dice, escucha y repite.

La comida nos une, pero decir gracias puede cambiar nuestro mundo.

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Paul E González Mangual es un escritor puertorriqueño, autor del libro Thankious, columnista de Sabrosía Puerto Rico, amante de la gastronomía de alta calidad, entusiasta del whiskey, adicto al café y fundador de FOODIEcations.

 

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