La noticia del fallecimiento de la chef Anne Burrell, una de las figuras más carismáticas y queridas del Food Network, ha generado una ola de reacciones entre colegas, amigos y admiradores en la industria gastronómica.
Burrell murió el martes 17 de junio en su hogar en Brooklyn, Nueva York, a los 55 años. Según reportó la revista People, oficiales del Departamento de Policía de Nueva York acudieron a la residencia en respuesta a una llamada al 911 sobre un posible paro cardíaco. La causa oficial de su muerte aún no ha sido confirmada por la Oficina del Médico Forense.
Conocida por su energía inconfundible, su melena rubia alborotada y su pasión por la cocina, Burrell no solo enseñó técnicas culinarias a millones de televidentes, sino que también dejó una marca imborrable en sus compañeros de trabajo. A continuación, algunas de las reacciones más destacadas del mundo culinario:
Robert Irvine, chef británico y presentador, expresó su conmoción al conocer la noticia:“Anne no era solo una chef apasionada. Era una luz vibrante que iluminaba cualquier espacio en el que entraba. Su energía era contagiosa y su compromiso con la enseñanza fue admirable. Estoy profundamente entristecido por esta pérdida”.
Tyler Florence, quien compartió pantalla con Burrell durante múltiples temporadas, escribió:“Anne era un verdadero regalo. Su humor, su fuerza, su forma directa de hablar y su habilidad para hacerte sentir en casa… eran únicos. La extrañaré profundamente, como colega y como amiga”.
Carla Hall, reconocida por su participación en Top Chef y como presentadora, compartió:“Anne era una cocinera extraordinaria y una maestra feroz. No tenía miedo de ser ella misma y por eso inspiró a tantos. Su legado perdurará en cada cocina que tocó”.
Aarón Sánchez, jurado de Chopped y promotor de la cocina latina, se refirió a ella con afecto:“Me parte el corazón saber que ya no está con nosotros. Anne tenía un fuego interno y una alegría de vivir que se sentía a kilómetros de distancia. Fue una amiga leal, una mentora dedicada y una fuerza imparable en nuestra industria”.
Otras figuras también se sumaron al duelo colectivo. El chef Ming Tsai calificó la pérdida como “inimaginable” y la chef Stephanie Izard destacó que “Anne tenía una presencia que simplemente no se puede reemplazar”.
Desde su debut televisivo como sous-chef en Iron Chef America hasta su rol protagónico en Worst Cooks in America, Burrell demostró que la cocina es tanto un arte como una plataforma de enseñanza y transformación. Para muchos, fue una guía, una inspiración y un ejemplo de autenticidad.
La televisión gastronómica pierde a una de sus grandes protagonistas, pero su legado vivirá en cada receta, cada clase y cada cocinero que, alguna vez, aprendió con ella.